El Covid-19 no sólo nos trajo repercusiones sanitarias, sino también se ha hecho presente de manera muy significativa en el ámbito laboral de las personas, lo que ha puesto a las empresas a trabajar de manera activa en la recuperación del capital humano.
El Currículum Vitae es donde plasmamos de manera ordenada una serie de datos personales, académicos, experiencias laborales, algunas fortalezas que tengamos en nuestra área de trabajo y referencias personales.
Es increíble la cantidad de mujeres que argumentan su permanencia en casa con esta frase, aun cuando en la actualidad se ha avanzado en temas de equidad de género
Mayo, un mes en el cual reconocemos los esfuerzos, años atrás, de las personas por un derecho digno al trabajo, así como el nuestro hoy en día.
Presentamos altas expectativas desde que emprendemos una carrera profesional hasta el momento de finalizarla, para aterrizar en la realidad de no encontrar empleo. Debido a que, la experiencia laboral resulta clave para los reclutadores al momento de buscar capital humano. Por otra parte, ante la falta de experiencia, surge otra dificultad, la confección de un currículum.
Démosle la atención que merece a lo más importante que tenemos; nuestro cuerpo y salud..
“Todos vamos hacia allá”
“Quisiera cambiarme de trabajo, pero está difícil, ¿Quién me va a contratar?, tengo 57 años (…)”
LinkedIn se ha convertido en una red social orientada al uso empresarial, en crear relaciones nuevas que te acerquen a tus objetivos profesionales, sean estos de empleo o de negocio.
En su libro «Trabajo Profundo», Cal Newport sostiene que la capacidad de concentrarse de forma intensa y prolongada en tareas complejas es una habilidad cada vez más valiosa en el mundo actual. En un entorno cada vez más digitalizado, los distractores abundan, lo que puede dificultar la concentración y la productividad.
